Mientras tanto el roble americano como el francés aportan taninos y aromas, el roble francés contiene más taninos y menos aromas a “roble” que el roble americano. El roble americano da una sensación más agresiva en la boca y un aroma a vainilla y coco inmediatamente evidente. El roble americano contiene más de vainilla (aroma de vainilla) y compuestos más olorosos.
Las barricas de roble francés son más sutiles y especiadas, ofreciendo texturas de satén o de seda. Las barricas de roble americano tienden a ser más fuertes en sabor, con los típicos aromas a vainilla o coco, resultando en vinos con una textura más cremosa.
Cuando se trata de barricas de vino, todos los bodegueros buscan algo diferente. Si preguntamos a cinco enólogos, casi seguro que tendremos cinco respuestas diferentes. No hay elección correcta o incorrecta de barrica de vino; depende de los que buscamos crear.